Junio siempre es un mes de tránsito -si es que alguno no lo es- donde acaban los cursos y comienzan las etapas de vacaciones…El cielo cambia de tono, y la vegetación ha consolidado el verde oscuro de la clorofila, se ha asentado en el reino vegetal y espera paciente y confiada, que vaya pasando el agostamiento del calor zenital, hasta llegar a las postrimerías de septiembre con los cielos malvas y las briznas de paja volando polvorientas en los momentos de tormenta.